jueves, 15 de julio de 2010

 
 
Flato a las elecciones.

Existe un lenguaje común para todos los seres humanos en cualquier parte del mundo es el símbolo, mas que un coloquio o un idiolecto es un entendimiento ecuménico, a escasos 6 días de elegir nuestro nuevo gobernante todos los colombianos sin excepción alguna que se encuentre con todas sus capacidades mentales en un buen estado y desarrollo ha sentido un miedo común, inconsciente “tal vez”, colectivo y mancomunado a tal extremo que quizá tengamos nuestros ojos vendados por un inmenso y largo retazo de tela ese que los medios de comunicación suele atar tan bien a nuestras cabezas.
Ahora nos encontramos navegando en una “ola verde” como alguna vez navegamos en una ola repetitiva y falsa “trabajar, trabajar y trabajar” la cual no solo derribo cuatro años de poder, albergó miedo, llevo el sistema de salud a lo más ínfimo, si no, que también gracias a su excelente retórica (porque hay que reconocerlo, al pan, pan y al vino, vino) robo literalmente y de frente a nuestra hermosa Colombia, ahora que nos encontramos navegando en esta desbordante ola verde deberíamos atrevernos a pensar claramente si tomaremos la mejor decisión, dejar la bruma a un lado y es que no necesitamos un gobernante con supremacía y demagogia absoluta, tampoco un títere filosófico, necesitamos un ser ávido que solucione nuestros problemas y ponga en marcha este país; no necesitamos un Nixon porque con Uribe nos dimos cuenta que no carecemos de él, querido compatriota déjame decirte eres un digno representante, no queremos más casos Watergate o como buen colombiano “falsos positivos”.
Queremos y necesitamos un gobernante inteligente, eficaz, diáfano, tenemos muchas opciones este año para  meditarlo, es nuestro país, nuestro estado, estamos poniendo en juego nuestro sistema de gobierno tal y como lo queremos y ante todo lo MERECEMOS no necesitamos un gobernante anodino.
¿Cuál de todos ellos puede con esto? ¿Cuál está realmente capacitado?
Nuestro hermosísimo y querido país, ciudad, región, pueblo ya ha sido lo suficientemente afectado y maltratado, estafado y violado, así que, no nos dejemos de una lipotimia de RCN o CARACOL que si este actor salió en una publicidad que si aquel otro también o si mi compañero se dejo arrasar por una ola pasajera como atávicamente lo fue. No, ya tenemos suficientes evidencias brutales para volver a caer; cada quién tiene su propio discernir así que a ponerlo en marcha, a poner a trabajar o a camellar como dirían los paisas ese cerebro, los pensamientos.


¡A tomar la mejor decisión!