La importancia de
la memoria audiovisual
¿Cómo mediante el
cine, la televisión, documentales, fotografías y audios podemos desarrollar
contenidos que recreen memoria para el país? Plantearemos entonces, una
relación entre memoria audiovisual y memoria social.
Existen
acontecimientos que han tocado la columna vertebral de Colombia, los cuales marcaron recuerdos de
diferentes generaciones, formando una identidad colectiva.
¿Cómo conocer la
historia de mi país? ¿Cómo lograr que los colombianos no suframos de amnesia
frente a los episodios desgarradores? La mejor manera de hacerlo es mediante
contenidos audiovisuales de calidad, que nos permitan en la intimidad de
nuestros hogares y memoria recordar lo sucedido, corvintiéndolos en patrimonio
social, cultural y audiovisual, al hablar de esto recuerdo que alguna vez leí de Repetto (2006). “La memoria y la importancia de la
conservación son temas que deben centrar nuestras investigaciones y
proyectos. Un pueblo sin memoria está condenado al olvido, entendido
como la falta de todo, puesto que sin ella no sería factible la conservación
de conocimientos para transmitir formas de cultura. Al no poder hacerlo no
tendríamos identidad y no podríamos reconocernos como parte de un todo y,
finalmente, no podríamos relacionarnos con el mundo que nos rodea. La memoria
colectiva es tan decisiva para la vida social como lo es la memoria individual
para cada uno de nosotros”.
Alrededor de unos
seis años, tuve la oportunidad de conocer la historia de Trujillo, ubicado al
norte del departamento del Valle, este ha sido tal vez, el mayor episodio de
olvido de todos los colombianos, de sus vecinos, pero no de sus habitantes; los cuales luchan día a día por
mantener vivo el recuerdo de aquellos que murieron victimas de los
enfrentamientos entre narcotraficantes, paramilitares y militares.
La masacre ocurrida entre 1986 y 1994 fue una oleada de terror, en efecto, en Trujillo los homicidios, torturas y desapariciones forzosas produjeron el desplazamiento de habitantes de muchas veredas, la destrucción de núcleos familiares, desarticulación de las organizaciones campesinas, y hasta la muerte por causas como "la pena moral" de numerosos sobrevivientes y sus familias.
Historias como la
Guerra de los Mil Días, la Masacre de las Bananeras, el asesinato de Jorge
Eliécer Gaitán, el Bogotazo, la masacre de Trujillo, el ataque Del Club El Nogal entre otras son aquellas
que merecen un arduo trabajo de investigación por parte de nosotros los
realizadores audiovisuales para la conservación histórica de memoria hacia
futuras generaciones.
¿Por qué no
producir mejores contenidos basados en nuestra historia?
Uno de los temas importantes
que han adaptado a largometraje es el de la toma al palacio de justicia en
1985, la película Antes Del Fuego de la directora Laura Mora, nos cuenta la historia
de una pareja de periodistas que investigan el por qué el asesinato de un amigo
en común, estas investigaciones los llevan a los dias previos de dicho suceso, a
través de una historia periodística y romántica recrean aquella anécdota que
hace parte de uno de los momentos mas trágicos de nuestro país. La película no
esclarece o explica hechos, lo que vemos en pantalla es nuevamente ese momento
crucial que vieron en directo en los hogares colombianos nuestros padres, abuelos
y generaciones pasadas.
Este proyecto
audiovisual esta ambientado en la época
(1985), se cuidaron detalles de vestuario, inmobiliaria e indumentaria y desde
post producción se acercaron al color con el que en aquellos días se grababa,
se utilizó cámara al hombro con la intención de usar loops audiovisuales de los
hechos reales como escenas de apoyo.
Actualmente somos
más los que nos interesamos por la producción audiovisual entendida como un
todo. Cada día decenas de personas alrededor del mundo producen varios
registros fotográficos, visuales y sonoros de lo que ocurre. Este material se utliza
en redes sociales para compartir al instante los hechos. Todo esto parece estar
a favor de nuestra generación, porque nos permite almacenar material.
Pero en realidad
¿son fundamentales los contenidos audiovisuales para el patrimonio de la
sociedad? Este interrogante lo reponde el director de la UNESCO Matsuura (2007). “Los documentos audiovisuales, imágenes en movimiento
y grabación de sonido son valiosas puertas de acceso al pasado. Ellos nos
introducen en los dramas colectivos de nuestra historia reciente. Nos permiten
experimentar de primera mano cómo un arte era practicado, nos muestran cómo la
gente iniciaba sus negocios, nos cuentan mucho acerca de nosotros mismos y de
los demás, dónde hemos estado y qué nos hace ser lo que somos”.
Es importante como
profesionales en el medio audiovisual y digital encargarnos de almacenar todo
el contenido mediático, que, las redes sociales nos enseña desde diferentes
partes del mundo, no solo de hechos significativos, si no, también de
películas, libros, fotografías, música y de todo aquello que nos apasiona e
interesa. Esto refleja nuestros intereses y hace parte nuestra memoria
individual.
Estamos hechos de
historias y nuestro trabajo principal es transmitirlas, ya sea a través de una
película, filminuto, crónica o simplemente una fotografía o audio, lo relevante
es hacerlo con ética, elaborar una investigación fina y detallada, concebir una
buena idea y desarrollarla de una manera innovadora.